miércoles, 31 de marzo de 2010

Los nerds mandan

Siempre el "nerd" (si definimos este anglicismo en castellano, sería algo como, persona altamente ilustrada, de fea apariencia, e incapaz de despertar el deseo sexual del sexo opuesto) es visto como el alivio cómico de las películas dramáticas, o el protagonista ridículo de las comedias. Hasta existe una comedia, La vengaza de los nerds (1984), que los reinvindica, aun que sea en broma. Pero en realidad, Hollywood tiene muestras en donde los Nerds son también los dueños del espectáculo, de hecho, en estas cintas, los nerds mandan.

1) Contacto (1997): La divina Jodie Foster ha interpretado casi toda la gama de personajes posible, prostituta adolescente, heroína infantil, detective avezada, y en este caso, nerd intergaláctica. El bonus de su personaje, es el ateísmo que profesa, el cual le cuesta el primer viaje, pero también le salva la vida. Incluso admite que nunca ha sabido explotar el lado sexual de su femineidad cuando le pide consejos de moda a Angela Basset. Foster logra darle duro a todo el mundo, con todas las armas de los nerds.



2) Puerta estelar - Stargate (1994): Esta película toma el enorme riesgo por colocar de protagonista a uno de los más recontra, archi, hiper nerds que se han filmado en celuloide - James Spader.





Y por si fuera poco, el señor Spader no solo se vuelve un nerd intergaláctico, capaz de descubrir el verdadero significado de los jeroglíficos egipcios, si no su uso e importancia en el viaje cósmico. De paso también logra enamorar a la preciosísima Mili Avital, belleza singular para algures de alguna galaxia muy, muy lejana.


Mili Avital

3) Lucas (1986): Esta película es la apoteosis de todo nerd, amas a una belleza, la belleza no te bola, te lanzas a una locura, casi mueres, aun así no te da bola, pero te vuelves el héroe de tu cole, ganándote del corazón de otra chica (Winona Ryder ni más ni menos). Conmovedora actuación del recientemente fenecido Corey Haim, y un guión entretenido con diálogos ingeniosos, como esa escena en la ducha luego del entrenamiento. Talvez Lucas no obtiene el amor de Maggie, pero obtiene algo mayor, su triunfo personal al demostrar su valentía y pasión.


Escena de Lucas


4) Felices juntos (1989): El versátill y adorable Patrick Dempsey le da vida a este personaje "nerd literato", quien por mera coincidencia acaba compartiendo el cuarto con la sensualísima Helen Slater. Lo que al comienzo se torna en una intolerable coincidencia, se va convirtiendo en una divertida amistad, y luego un amor sincero. Es curioso ver a Brad Pitt en uno de sus primeros roles, como el matonesco novio de la Slater. El interpretar a nerds enamorados, le valío a Dempsey el ostracismo y el aislamiento en Hollywood durante una década, hasta que fue "redescubierto" para la serie "Gray's Anatomy".


felices juntos

5) El día después de mañana (2004): Esta película de desastres no solo se da el lujo de colocar un cuarteto de nerds en el protagonismo de una de sus historias, si no que hasta coloca una convención de nerds chancones en el corazón de Nueva York. Me impresionó sobremanera el primer enfoque de una nerd de rostro adorable. Es casi como una especie de anti-nerd (si lo entendemos desde el punto de vista del anti-héroe). La bella Emmy Rossum no se amilana al tener que interpretar a una sabelotodo. Jennifer Morrison llevaría el rol de la nerd bella a alturas celestiales interpretando a la Dra. Cameron en la serie House. Pero volviendo a esta película, no solo los nerds salvan la vida de varias personas atrapadas en la biblioteca de Nueva York, también somos testigos de la masiva "inmigración ilegal" de miles de estadounidenses hacia México - insuperable.



6) Poción de amor Nº 9 (1992): Esta película parece anclarse en el dicho "dos son mejor que uno", así que no tenemos un nerd, si no dos. Tate Donovan y Sandra Bullock, en su momento considerados deseables, ahora cambian de piel para encarnar a dos científicos nerd choteados, y decepcionados del amor, que encuentran una poción infalible para despertar lo que cupido lograba con sus flechas. El dilema final de estos alquimistas del amor, cuando descubren que se aman, pero no pueden hablarse al estar bajo los efectos erotógenos de la infame poción es uno de los conceptos que más me ha sorprendido en el universo de las comedias románticas.


O'Neal y Bullock


7) Flirteando (1991): Si James Spader es el principe de los nerds, Noah Taylor es el emperador de todos ellos. Seamos claros en esto, cuando digo emperador, creo que estoy siendo un poco corto en mi calificativo, el Señor Noah Taylor es un nerd universal, su imagen sería nérdica hasta en los confines de la realidad. Y aun así logra ser el único en conquistar el corazón de la exótica y encantadora Thandie Newton. La escena en donde se escapan del colegio para consumar su noche de pasión en un hotel haciéndose pasar el por señor y la señora Sartre (sí, sí, el mismo Jean Paul Sartre) es inmarcesible.

Noah y Newton



8) Juegos de guerra (1983): Este es el nerd más simpático de toda la lista. Mathew Broderick es un versátil actor, que ha interpretado a distintos personajes, incluyendo a un desenfadado holgazán en Ferris Bueller's Day Out (Film de culto en la hermana República de Sudáfrica) y al inspector Gadget, que es como un nerd robotizado. En este cinta él interpreta a un nerd de las computadoras, que logra crackear el acceso a la computadora central de la defensa de los EE UU casi iniciando la tercera guerra mundial. Al final, él mismo tiene que deshacer sus fechorías, de una manera casi tonta, pero original. Como es obvio, logra conquistar el amor de la linda Ally Sheedy en el proceso.



9) Damo de compañía (2008): Ya hemos mencionado al versátil Patrick Dempsey en el número 4 de esta lista, pero la verdad es que este actor ha sido la epítome del Nerd galán, cuyas conquistas incluyen a las hermosísimas Helen Slater, Amanda Peterson y recientemente la divina Ellen Pompeo. En esta historia, nuestro simpático nerd es víctima de la peor humillación que un hombre puede recibir. Ser considerado para "damo" de compañía en una boda. Es que la protagonista no puede dejar de ver a su "liiiiiiiiiiiiindooo amiguito" como un ser afálico o asexuado, hasta el punto de ofrecerle un puesto entre sus amigas para acompañarla en su boda. Pero recurriendo a ciertas medidas desesperadas, nuestro héroe logra ganar el corazón de la protagonista. Así siempre es para los nerds, si quieren el amor de una bella mujer, el camino siempre es insólito...



10) Licencia de conducir (1988): El recientemente desaparecido Corey Haim ahora sí consigue llevarse el premio mayor, una de las más bellas actrices que han encandilado a los adeptos de Hollywood, me refiero a Heather Graham. El eterno nerd enamorado decide jugarse el todo por el todo por su chica, y este triunfo romántico parece mandarnos un mensaje a todos nosotros, los nerds de corazón, todo está en la confianza, si confías lo lograrás. Este videito parece recalcar una y mil veces mis palabras, disfrútenlo.





lunes, 29 de marzo de 2010

El Pisco Sour llega a Angola




Para amenizar un poco el fin de semana, debo referirles un hecho que puede tornarse histórico. El dia de ayer me invitó a almorzar un amigo y paciente, a su restaurante, en la hermosa playa de la Isla de Luanda. Hace tiempo le había prometido preparar un pisco sour, así que llevé una botella de Pisco Quebranta Santiago Queirolo (por supuesto) y con el barman de este local, nos lanzamos a la aventura de hacer llegar este fenomenal coctel a este rincón del Africa. El resultado, y usando la conocida prorción tres-de-pisco-una-de-limón, fue espectacular, todo el mundo quedó embelesado por la textura y aroma de nuestra bebida bandera, sobre todo mi amigo, que me ha declarado que el Pisco Sour ahora será el trago estrella de su nuevo local en el centro de Luanda.

Me siento feliz por haber contribuído a que algo tan central y tan delicioso de nuestra cultura, ahora también forme parte del universo gastronómico luso-africano de este lugar, que ahora me acoge.

Salud...

sábado, 27 de marzo de 2010

Mi piano ha muerto



Hoy ha sucedido algo terrible, que trasciende la frase metafórica que da el título a este post. Luego de atender a mis pacientes, recoger a mi hija del nido y lidiar con un tránsito algo leve en esta ciudad de Luanda, pensaba intentar algunos arpeggios para finalmente postear un video del nocturno 1 de Chopin, que estoy debiendo desde el dia de su bicentenario. Llego a mi casa y prendo el botón de mi piano (es un Casio PX-720) y al ejecutar dos escalas me doy cuenta que hay varias teclas "mudas". Prendo y apago sucesivas veces el aparato y nada, las teclas siguen mudas.

La desesperación me embarga, ¿será posible que mi piano haya dejado de funcionar? Justo en un país donde es tan difícil comprar instrumentos musicales. Esta pequeña joyita la compré de segunda mano a un amigo diplomático ruso cuando estaba retornando para su país, y ahora, luego de 5 años de servicio, su voz quedaba severamente cercenada.

Bueno, mi querido y amado amigo, eras el vehículo de mi pasión musical, especialmente para interpretar a Beethoven, ahora te has quedado sin siete de tus ochenta y ocho sonidos, y ya no sirves para tu propósito. Justo cuando te estabas volviendo protagonista de algunos videos de youtube, respondiendo a mis toques, me abandonas de esta manera


Rango de notas que han dejado de funcionar en mi piano.

Ahora también mi musa sonora queda muda, no sé durante cuanto tiempo, espero que sea corto, espero que no dure mucho este silencio, espero que las teclas que pulsen mis dedos sean otras, aparte de las que ahora forman estas palabras.

Oh, que mezquina es una letra, comparada con una nota.

Oh, que dulzura es el sonido, comparado con un grafismo. Acaso el grafismo solo lleva parte del mensaje, y una nota al final es una onda, una vibración dulce de la materia circundante.

Que silenciosa está ahora mi sala, más silenciosa ahora que veo a mi piano, parcialmente mudo, efectivamente muerto...

No quiero escribir ni un poema ni una oda, hasta un fragmento de Czerny sonaría mejor. Diantre, hasta una tonadilla de Claiderman sonaría mejor. Adiós querido piano, adiós. Otro vendrá a reemplazarte, sí, pero yo no te olvidaré jamás, en esta lejana tierra he podido seguir con mi arte, he podido seguir teniendo la ilusión de no resignarme a la monótona cacofonía que se oye en estas radios. He podido sentir el placer de Chopin, la pasión de Beethoven, el razonamiento de Bach, los arpeggios sorprendentes de Mozart, y milagrosamente, algún bello acorde del gran Rachmáninov. Hasta mis hijos han podido pulsar tus teclas, felizmente pude filmarlos ese día, a los tres juntos.

Quedó pendiente Chopin, en otro tendrá que ser, y a pesar que eres eléctrico y de toque programado, tal que no se siente el pulso y la resistencia de un piano acústico, pero aun podía deleitar a mis muñecas y falanges con los preciosos arpeggios del genio polonés. En otro será, pero que pena que sea en otro.

Adiós querido piano, no creo que pueda repararte. En este lugar donde la inepcia es el pan de cada día, arriesgo a que te malogren más, y todo sea una pérdida de tiempo y de dinero, espero encontrar algún fin noble para lo que queda de tí.





martes, 23 de marzo de 2010

Adoro los escenarios continuos - Ava Adore de Smashing Pumpkns


El tercer capítulo en el tercer libro de "Conversación en la Catedral" plantea un desafío grande de adaptación cinematográfica. Y eso si consideramos que el tercer libro es el más "ortocrónico" de los cuatro. Pero en este libro se observa todo el mecanismo de relojería elaborado por Cayo Bermúdez para manejar los hilos del poder. Se ve como no tiene problemas para acceder a todos los poderes del estado, sea el ministerio del interior, de defensa o de relaciones exteriores. Somos testigos de la inmediata disponibilidad de sus colaboradores, sean estos secretarios de altas esferas del estado, generales, coroneles, edecanes, como sus subalternos más denigrantes. Cayo Bermúdez brilla en toda su magnitud de manipulador, chantajista, extorsionador, degenerado, arribista, oportunista, falsario, elucubrador y caficho.

Que enorme desafío para el actor que lo encarne, y la sucesión de escenas es tan vertiginosa, que no se me ocurre otro recurso que usar escenarios continuos, dondel el actor va desplazándose de escenario en escenario, sin cortes y con un frenético movimiento de cámaras (es por esto que pienso que "conversación..." debe ser filmada en formato digital.

Este video es una inspiración para ello, aunque se nota el uso de lente super ancho, los recursos de iluminación y escenografía deben ser llevados a su máxima expresión.





Ese es otro de los rompecabezas que me apasionan en estos días, y la embriagadora música de la 5a suite inglesa de Bach me parece un dinámico y excelente fondo musical...







lunes, 22 de marzo de 2010

El Suicidio


Guillaume Apollinaire retradado por Maurice Vlamick


Maurice Vlaminck, Portrait of Guillaume Apollinaire (1903)

En estos días he podido leer algunos post muy interesantes sobre el suicidio, tema sempiterno no solo en el campo psiquiátrico, y me aventuro a saltarme varios pasos en el orden de esta bitácora, para incorporar este poema del genial Guillaume Apollinaire.





Le suicidé



Trois grands lys Trois grands lys sur ma tombe sans croix
Trois grands lys poudrés d'or que le vent effarouche
Arrosés seulement quand un ciel noir les douche
Majestueux et beaux comme sceptres des rois

L'un sort de ma plaie et quand un rayon le touche
Il se dresse sanglant c'est le lys des effrois
Trois grands lys Trois grands lys sur ma tombe sans croix
Trois grands lys poudrés d'or que le vent effarouche

L'autre sort de mon cœur qui souffre sur la couche
Où le rongent les vers L'autre sort de ma bouche
Sur ma tombe écartée ils se dressent tous trois
Tout seuls tout seuls et maudits comme moi je crois
Trois grands lys Trois grands lys sur ma tombe sans croix



El suicidio


Tres grandes lirios Tres grandes lirios sobre mi tumba sin cruz
Tres grandes lirios empolvados de oro que el viento asusta
Regados solamente cuando un cielo negro los ducha
Majestuosos y bellos como cetros de reyes.


Uno sale de mi herida y cuando un rayo lo toca
Se levanta sangrando es el lirio de los pavores
Tres grandes lirios Tres grandes lirios sobre mi tumba sin cruz
Tres grandes lirios empolvados de oro que el viento asusta

El otro sale de mi corazón que sufre sobre el lecho
Donde lo roen los versos El otro sale de mi boca
Sobre mi tumba apartada ellos se yerguen, los tres
Solos solos y malditos como así yo lo creo
Tres grandes lirios Tres grandes liros sobre mi tumba sin cruz

Traduccion (Tony Chavez Uceda)


El poema de por sí es excelsamente bello, (al parecer eso de los lirios podría haber inspirado uno de los cuadros del Dr. Kevorkián). Las metáforas de la herida mortal autoinflingida, del corazón roído por los versos (y de paso la depresión) y de esa boca muda para siempre. El suicida reconoce su pecado y niega para siempre la cruz sobre su tumba, una tumba que también es condenada al ostracismo en el mismo cementerio. Pero si esto no es suficiente, qué pasaría si el texto de este poema es tomado por el último gran sinfonista de la historia, y se le coloca una música infinitamente sobrecogedora, este es el resultado.





El gran compositor se da el lujo de usar una orquesta minimalista para esta adaptación de 11 poemas de Lorca, Apollinaire, Küchelbecker y Rilke para colocarles música y presentar un tratado lírico musicológico sobre la muerte. La muerte en todas sus faces, incluyendo el suicidio. Algunos proctognósticos comentaristas han asociado esta sinfonía a una protesta de la invasión de la URSS a Checoslovaquia, pero dejemos que sea el mismo Shostakovich quien nos hable de su sinfonía:

"Quiero que los oyentes reflexionen sobre mi nueva sinfonía... que se den cuenta que deben llevar vidas puras y fructíferas para glora de su Patria, su gente y las ideas más progresivas motivadoras de nuestra sociedad socialista. Eso es lo que yo pensaba al escribir esta obra. Quiero que mis oyentes, mientras salgan del teatro luego de oir mi sinfonía, que piensen que la vida es bella."

Es decir, morir es estúpido comparado con vivir, vivir siempre será maravilloso y valioso, porque solo esa existencia tendremos. El resto no existe, el resto no lo veremos, no seremos testigos de algo luego de nuestra muerte. Solo quedará la pena para algunos de nuestros conocidos, pena que también será historia algun día.

No hay razonamiento más lógico y contundente para convecernos que debemos amar la vida con todas nuestras fuerzas.

(Dedicado a mis amigos Lizardo y José Manuel)

jueves, 18 de marzo de 2010

Paganini: concierto para violín

El siguiente LP que paso a comentar es uno que también se volvió en mi favorito durante mi tiempo en Moscú, el gran cocierto en mi menor de Paganini, a cargo del virtuoso Salvatore Accardo. En estos tiempos ya me había despedido definitivamente del violín, y la grán metrópoli rusa ofrecía un sinúmero de alicientes y distractores. Hasta ahora me pregunto por qué no me decidí a estudiar el maravilloso instrumento de cuatro cuerdas en mi tierra natal, cuando de ella han salido tan excelsos violinistas como Spivakov, Venguerov u Oistrakh. Pero eso ya queda también en el pasado, como las tardes en las que escuchaba este disco. Me llamaba mucho la atención del arte en su cubierta, esos tres violines espectrales y Paganini, con sus ojos cerrados, como en un éxtasis psicodélico. A mi asombro y sublime esimismamiento, contribuía mi padre contándome relatándome leyendas sobre como el genio Italiano había hecho un pacto con el diablo, cómo tocó un concierto en una sola cuerda, cuando las otras tres reventaron, y cómo fue declarado hereje por la iglesia católica al rehusar la extremaunción. Al parecer Paganini, en vida, estaba usando algunos trucos de marketing para promocionarse y convertirse en material de leyenda, pero en su historial médico se han documentado evidencia para afirmar que padecía del síndrome de Ehlers-Danlos, aunque coincido con la opinión de algunos colegas, que esto no tuvo que nada que ver con su genio o virtuosismo.

Pues ahora les dejo con el mismísimo maestro Accardo tocando el final de este fastuoso concierto.

miércoles, 17 de marzo de 2010

Sin Aliento cumple 50 años.

Sin Aliento
En tiempos recientes, el imprensionate Robert Rodriguez preconizó el uso de técnicas como el montaje, el corte en secuencia, los cambios de ángulo continuos, la "edición en cámara". Pero hace exactamente 50 años (hola, hola, está de bodas de oro) una pequeña película francesa revolucionó el mundo del cine: Sin aliento (1960). Esta magnífica cinta del genial Jean-Luc Godard no se destaca por tener un guión profundo o brillante, si no que es una cinta magistral en todo aspecto. Responde contundentemente a la pregunta ¿qué debe hacer un cineasta cuando cuenta con un presupuesto reducido, pocos recursos, y una férrea competencia? Variar el cuadro.


Pero ¿cómo variar el cuadro, y con poco presupuesto? La respuesta la dieron un grupo de cineastas franceses, entre ellos el maestro Godard, y rindiendo homenaje al grandioso Hitchcock, se dedicaron a filmar con pasión, desarmando y rearmando los elementos narrativos del celuloide, llevándolo por caminos inexplorados, reinventando el lenguaje cinematográfico. Godard se da el lujo de usar un argumento trillado, y trillarlo un poco más, pero su cámara es inquieta, saltarina, rompe las barreras del tiempo y del lugar, está en todo y en nada al mismo tiempo. Para muestra, veamos este clip.

En la primera parte la cámara parece obedecer la voz del personaje (in off), cada frase cambia el cuadro, cada idea nos llega por la vista también. Aunque es evidente que los retazos han sido tomados de la misma toma, el efecto es fresco y entretenido. En la segunda parte, cuando Jean Paul Belmondo y Jean Seberg conversan en la cama. Diálogos sin sentido, recurrentes y redundantes, palabras sueltas, ideas que parecen divagar de un lado a otro, pero el maestro compensa el diálogo con una serie de movimientos de cámara que captan diferentes detalles del apartamento, hasta un punto en que ya lo que ellos se digan no guarda mayor interés. La parte en la que él le da 8 segundos para sonreír sino la estrangula es clásica.

De visión obligatoria para cualquier cinéfilo, Salut Monsieur Godard!

viernes, 12 de marzo de 2010

La mejor canción del mundo.



Allí está, su sonido es inconfundible. Su melodía en claro estilo polifónico barroco, pero con el toque latino de sus intervalos. Ella siempre será un motor para mi pasión por la música. Me refiero a la gran obra maestra de Agustín Barrios Mangoré, La Catedral. Con la ilimitada fuente de información de la red, hasta he podido ilustrar la misma carátula del LP que tenía mi padre. Raudamente me apuré en grabarla en un cassette que hacía el deleite de mis tardes luego del colegio. Al finalizar dicha obra, el pensamiento siempre era el mismo: ¡Esa es la mejor canción del mundo!

A mis siete años de edad, la sola idea de poder interpretar tan excelsa pieza estaba en las regiones del milagro o de lo excelso, pero ocho años más tarde, luego de regresar de Lisboa con un teclado de cuatro octavas, más amplio y versátil que el humilde PT-100, la obra ya caía dentro de mis posibilidades. Felizmente, luego de sumergirme entre las archivadísimas partituras de mi padre, pude encontrar la que buscaba, la de esta magna obra, "La Catedral". Ya había transcrito hasta ese momento unas 10 obras para guitarra, pero esta es la que más adoro y amo. Tocarla siempre me trae una cascada de emociones, y aunque ahora esté plagada de errores, al no disponer de mucho tiempo de ensayo, mi ser se conmueve como en aquellas lejanas tardes de 1981, al comenzar a escucharla.

El niño que aún habita en mí sigue pensando, esta es la mejor canción del mundo.


Fallece (La Tia) Julia Urquidi

Don Mario y Julia Urquidi




Se ha apagado la vida de una las musas, inspiradoras de una de las novelas más divertidas y geniales de la literatura universal. Julia Urquidi, ex esposa de Don Mario Vargas Llosa, fue la mismísima tia Julia, protagonista de la sorprendente obra "La tia Julia y el escribidor". Esta es una novela sumamente autobiogáfica, porque Doña Julia Urquidi nació en Cochabamba, Bolivia, fue tia politica del escritor, y se casaron cuando el mismo contaba con unos tiernos y escasos 19 años, lo que generó todo un escándalo en su familia. Pero el fuerte de la novela no está en la descripción de los amoríos, si no en la desconcertante reacción psicótica de Pedro Camacho, el escribidor, que acaba por entremezclar sus radioteatros. En este extracto podemos ser testigos de la excelsa vena creadora de Don Mario:


Pero he aquí que a las cuatro y trece minutos, a los cincuenta mil espectadores les fue dado conocer lo insólito. Del fondo más promiscuo de la Tribuna Sur, de pronto -negro, flaco, altísimo, dientón-, emergió un hombre que escaló livianamente el enrejado e irrumpió en la cancha dando gritos incomprensibles. No sorprendió tanto a la gente verlo casi desnudo -llevaba apenas un taparrabos colgado de la cintura- como que, de pies a cabeza, tuviera el cuerpo lleno de incisiones. Un ronquido de pánico estremeció las Tribunas; todos comprendieron que el tatuado se proponía victimar al árbitro. No había duda: el gigante aullador corría directamente hacia el ídolo de la afición (¿Gumercindo Hinostroza Delfín?), quien, absorto en su arte, no lo había visto y seguía modelando el partido.


¿Quién era el inminente agresor? ¿Tal vez el polizonte aquel, llegado misteriosamente al Callao, y sorprendido por la ronda nocturna? ¿Era el mismo infeliz al que las autoridades habían eutanásicamente decidido ejecutar y al que el sargento (¿Concha?) perdonó la vida en una noche oscura? Ni el capitán Lituma ni el sargento Concha tuvieron tiempo de averiguarlo. Comprendiendo que, si no procedían en el acto, una gloria nacional podía sufrir un atentado, el capitán -superior y subordinado tenían un método para entenderse con movimientos de pestañas- ordenó al sargento que actuara. Jaime Concha, entonces, sin ponerse de pie, sacó su pistola y disparó sus doce tiros, que fueron todos a incrustarse (cincuenta metros más allá) en distintas partes del calato. De este modo, el sargento venía a cumplir, más vale tarde que nunca dice el refrán, la orden recibida, porque, en efecto, ¡se trataba del polizonte del Callao!


Bastó que viera acribillado a balazos al potencial verdugo de su ídolo, al que un instante atrás odiaba, para que inmediatamente -veleidades de frívola sentimental, coqueterías de hembra mudable- la muchedumbre se solidarizara con él, lo convirtiera en víctima, y se enemistara con la Guardia Civil. Una silbatina que ensordeció a los pájaros del cielo se elevó por los aires en la que las Tribunas de sombra y de sol entonaban su cólera por el espectáculo del negro que, allá, sobre la tierra, se iba quedando sin sangre por doce agujeros. Los balazos habían desconcertado a los peones, pero el Gran Hinostroza (¿Téllez Unzátegui?), fiel a sí mismo, no había permitido que se interrumpiera la fiesta, y seguía luciéndose, alrededor del cadáver del espontáneo, sordo ante la silbatina, a la que ahora se añadían interjecciones, alaridos, insultos. Ya comenzaban a caer -multicolores, volanderos- los emisarios del que pronto sería diluvio de cojines contra el destacamento policial del capitán Lituma. Éste olfateó el huracán y decidió actuar rápido. Ordenó que los guardias prepararan las granadas lacrimógenas. Quería evitar una sangría a toda costa. Y unos momentos después, cuando ya las barreras habían sido traspasadas en muchos puntos del redondel, y, aquí y allá, taurófilos enardecidos se precipitaban hacia el coso con belicosidad, ordenó a sus hombres que rociaran el perímetro con unas cuantas granadas. Las lágrimas y los estornudos, pensaba, calmarían a los iracundos y la paz reinaría de nuevo en la Plaza de Acho apenas el viento disipara los efluvios químicos. Dispuso asimismo que un grupo de cuatro guardias rodeara al sargento Jaime Concha, quien se había convertido en el objetivo de los exaltados: visiblemente, estaban decididos a lincharlo, aunque para ello tuvieran que enfrentarse al toro.





Esta escena siempre ha dado vuelta en mi mente por sus ilimitadas potencialidades cinematográficas. Se imaginan, el árbitro en medio del campo, la cámara va girando alrededor de él, haciendo un acercamiento (un dolly con trayecto en espiral podría ser una solución) y en la siguiente vuelta, el árbitro es ahora un bravo matador, con su traje de luces, en medio de la plaza de Acho. Debo acotar también que esta obra ya ha sido llevada a la pantalla grande con el nombre de Tune In Tomorrow (1990), bajo la dirección de John Amiel, y con las interpretaciones de Peter Falk, Barbara Hershey y Keanu Reeves, como Varguitas (Martin Loader en la película), aunque creo que poco favor se le hizo a Don Mario colocando a Reeves en sus carnes.

Descansa en paz Julia Urquidi, siempre te estaremos gratos por haber sido la musa tras el élan creador de esta gran obra de arte.

miércoles, 10 de marzo de 2010

Lisboa




Luego del tour de Force que supuso escribir unos comentarios sobre mi muy apreciado compositor Dimitri Shostakovich, ahora me relajo por la tarde con estos versos en la lengua de Camões:


LISBOA

Cinzenta cor de rua
Cinzenta cor da chuva
Beijo escuro, sabor de uva
Cinzenta a cor da lua

Pombas piavam no Monsanto
E teu olhar ficou da outra beira
Cinzento rio, o mar abafou teu pranto
Cinzenta lua a brilhar de outra maneira

Ao meio dia tua mão nas minhas repousava
Titãs de som tiraram-te da praia
Cinzento riso ficou da outra beira
E eu no Tejo, flutuando me afastava

Ainda não tinha aquela ponte longa
As minhas penas la no Tejo eu afogava
Cinzenta pena, que manchava a lua
Cizento o teu olhar que la ficava

Assaz terrível o mistério teu
Mistério aquele que morría em Setúbal
Na Caparica as penas eram já memória
Só teu olhar pintava um pouco o ceu.

Vim outro dia da Baixa alegre
Pombas cinzentas no pombal piavam
Cinzento riso, virou uma cor alegre
Pois em Lisboa, lá, certo me amavam


LISBOA

Gris el color de la calle
Gris el color de la lluvia
Beso oscuro, sabor de uva
Gris el color de la luna

Palomas cantaban en el Monsanto
Y tu mirada quedó en la otra ribera
Gris el río, el mar calló tu llanto
Gris la luna brillando de otra manera

Al medio día tu mano en las mías reposaba
Titanes de sonido te sacaron de la playa
La risa gris quedó en la otra ribera
Y yo en el Tajo, flotando me alejaba

Aun no exitía aquél puente largo
Mis penas allá en el Tajo yo ahogaba
Gris era la pena, que manchaba la luna
Gris tu mirada que allá se quedaba

Bastante terrible era el misterio tuyo
Misterio aquél que moría en Setúbal
En la Caparica las penas eran ya memoria
Solo tu mirada pintaba un poco el cielo

Vine el otro día, de la Baixa, alegre
Palomas grises en el palomar cantaban
Gris la risa, se volvió un color alegre
Pues en Lisboa, allá, de cierto me amaban

Luanda 2010

lunes, 8 de marzo de 2010

Mi breve amor por el periodismo





Hay romances breves, ígneos, llenos de una gran y devastadora pasión, que nos dejan recuerdos y sobre todo, que nos cambian para bien o para mal, mayormente lo primero. Me resulta difícil explicar con precisión cómo me enamoré del periodismo. Será que el hecho de ver tus escritos publicados y reproducidos miles de veces, de manera cotidiana o regular. Tener la capacidad de darle algo tuyo a tantas personas. Legar para la posteridad una crónica del mundo en el que vives, y que sea objeto de ulterior estudio por próximas generaciones. Pero sobre todo, informar, llevar una noticia veraz y pertinente, que contribuya con la sociedad que te alberga.

Tantos románticos y cursis ideales pululaban en mi mente cuando me enamoré del periodismo, hasta el punto que mi padre me compró una máquina de escribir pequeña, parecida a la de esta foto, y al sentarme ante sus teclas y ver como quedaban impresas al instante mis palabras, me hizo sentir un élan de emoción indescriptible.

Me volví lector regular de los periódicos, sobre todo, del Diario La República, que me parecía el más respetable de todos. A parte que la portada siempre mostraba una imagen de la Madre Patria, y siempre lucía los bellos colores blanquirrojos de nuestra bandera. Pero fue este diario, mi querido diario la República, quien de un soberano plumazo, mató mi amor por el periodismo. Esto por medio de una noticia que desenmascaraba a un diario sensacionalista por publicar noticas absolutamente falsas. La peor, es que dicho periodicucho publicó el fallecimiento de un anciano varón, en medio de acciones amatorias con una chiquilla de 19 años, pero la República reportaba que dicho patriarca estaba vivito y coleando, e incluso daba su nombre y apellidos, dirección y número de libreta electoral, para quien quisiera comprobar la veracidad de su nota.

Grave crisis de desilusión, a mis tiernos ocho años me chocaba con una realidad que me parecía terrible. ¡Los periódicos publicaban mentiras! Que gran crimen, engañar de esa manera a personas que pagaban unas monedas para ser víctimas de embustes. Años después no solo me enteraría que los diarios de mi país se dedicaban al embuste o al sensacionalismo, también el prestigiosísimo New York Times ha tenido casos de plagio, fraude y simple y llana ficción desenfrenada. Aleccionadora y sempiterna la filípica severa del gran Gonzáles Prada sobre el periodismo en el Perú. Soprendentemente vigente aun en estos tiempos.

Pero al menos este amor por el periodismo me dejó una herramienta, completar un curso de mecanografía, que me permite escribir raudamente sobre las teclas. Amores van, amores vienen, besos y teclas no se detienen.

(dedicado a mi amiga Karen)

jueves, 4 de marzo de 2010

La crueldad del tiempo


Estos días han sido un torbellino cronológico, con tantas actividades y problemas para resolver, que los ochenta y seis mil cuatrocientos segundos del día se tornan escasos, mucho más escasos para seguir actualizando este blog, por eso traigo este bello poema sobre el tiempo, so pretexto de desmpolvar mis conocimientos del franchute, y de no ser tan negligente con este blog.



Instants Perdus



Vous êtes loin
Bien trop loin
Et je m'épuise
A vous compter
Ô mes souvenirs !
Chers souvenirs !
Temps passé
Vous êtes loin
Dans mon coeur
Dans ma mémoire
Et dans le temps révolu
Vous êtes loin
Emporté avec les airs
Que l'on fredonne,
Les musiques que l'on réecoute
Une atmosphère que l'on perçoit
Et les parfums qui nous assaillent.
Vous êtes loin
Bien trop loin
Instants vécus que l'on voudrait revivre
Pour en tirer,
Vraiment cette fois,
Tout le bonheur
Que, dans l'instant,
Nous n'imaginions pas
Vraiment connaître.


(Thierry François)


Instantes perdidos


Usted está lejos
Bien muy lejos
Y yo me agoto
Al contabilizarle
Oh, mis recuerdos!
Caros recuerdos!
Tiempo pasado
Usted está lejos
De mi corazón
De mi memoria
Y en el tiempo agotado
Usted está lejos
Llevada con las arias
Que tarareamos,
Las músicas vueltas a oir
Un ambiente que sentimos
Y los perfumes que nos asaltan.
Usted está lejos
Bien muy lejos
Instantes vividos que queremos revivir
Para obtener,
De veras esta vez,
Toda la dicha
Que, en el instante,
No imaginamos
De veras conocer.