El siguiente LP que paso a comentar es uno que también se volvió en mi favorito durante mi tiempo en Moscú, el gran cocierto en mi menor de Paganini, a cargo del virtuoso Salvatore Accardo. En estos tiempos ya me había despedido definitivamente del violín, y la grán metrópoli rusa ofrecía un sinúmero de alicientes y distractores. Hasta ahora me pregunto por qué no me decidí a estudiar el maravilloso instrumento de cuatro cuerdas en mi tierra natal, cuando de ella han salido tan excelsos violinistas como Spivakov, Venguerov u Oistrakh. Pero eso ya queda también en el pasado, como las tardes en las que escuchaba este disco. Me llamaba mucho la atención del arte en su cubierta, esos tres violines espectrales y Paganini, con sus ojos cerrados, como en un éxtasis psicodélico. A mi asombro y sublime esimismamiento, contribuía mi padre contándome relatándome leyendas sobre como el genio Italiano había hecho un pacto con el diablo, cómo tocó un concierto en una sola cuerda, cuando las otras tres reventaron, y cómo fue declarado hereje por la iglesia católica al rehusar la extremaunción. Al parecer Paganini, en vida, estaba usando algunos trucos de marketing para promocionarse y convertirse en material de leyenda, pero en su historial médico se han documentado evidencia para afirmar que padecía del síndrome de Ehlers-Danlos, aunque coincido con la opinión de algunos colegas, que esto no tuvo que nada que ver con su genio o virtuosismo.
Pues ahora les dejo con el mismísimo maestro Accardo tocando el final de este fastuoso concierto.
1 comentario:
Amigo, me he quedado muy impresionado con ese final del concierto, pero debías haber colocado la segunda parte pe... bueno igual seguí el link nomás, impresionante y abrumadorrrr
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