viernes, 23 de julio de 2010

Libro clave: El sabueso de los Baskerville de Arthur Conan Doyle

El Sabueso en acción

La primera racha copiosa de lecturas que tuve en mi adolescencia fueron las novelas policíacas. Ya me habían comentado algo al respecto de este género, despreciado por muchos, mis estimados amigos cubanos de la residencia estudiantil en Lefortovsky Bal, Moscú; pero cuando me regalaron este apreciable texto, no me imaginaba que el espigado y austero detective del 221B de Baker Street se iba a convertir en mi héroe ficticio incondicional. Esta sorprendente novela nos muestra a un Holmes en la plenitud de sus capacidades, y de arranque nos pasma con una serie de deducciones de un bastón olvidado por el Dr. Mortimer, quien llega poco después para exponer un problema singular, relacionado con una terrorífica leyenda respecto a un infernal sabueso que llega para ultimar a los miembros de una anatemizada familia. Luego la historia sufre una serie de reveses y situaciones de riesgo letal, que son francamente espeluznantes. Holmes logra desenmarañar un ovillo de complicados razonamientos que desenmascaran al asesino, ya saben, aquél del que menos sospechábamos.
Desde entonces me dediqué a buscar otras historias o novelas que tuviesen como protagonista al enjuto sabueso detectivesco, pero al mismo tiempo me resultaba cautivador su método deductivo, su minuciosa capacidad de buscar pistas o indicios, las brillantes y dramáticas conclusiones a las que llegaba. Estas lecturas alimentaron una pasión mayor por todo tipo de obras policiacas, de algunos autores tan notables como Agatha Christie, Dashiel Hammet, Ellery Quen, y el fenomenal John Dickson Carr. Estos ejercicios de lógica fueron una inspiración constante y tuvieron efectos profundos a futuro en mi vida. La novela policiaca también se convirtió en mi primer género literario a ser tomado en serio, tanto en su lectura como en su escritura, la única novela que he conseguido finalizar es una novela policiaca.
Para finalizar, aquí les dejo algunas citas sabrosas de esta singular novela.
"...sus equivocaciones [,Watson], muchas veces me han guiado hacia la verdad..."
"...confieso que condicio su cráneo." [Dr. James Mortimer a Sherlock Holmes]
El pergamino con la leyenda del sabueso está lleno de frases memorables "...los santos no han florecido en estos parajes."; "Sucedió que este Hugo [Baskerville] dio en amar (si, a decir verdad, se le puede dar tan radiante nombre a tal pasión infame)"; "Las palabras que profería Hugo Baskerville cuando estaba borracho podrían fulminar al hombre que las repitiese." "Subió a llevarle a su cautiva comida, bebida y talvez algunas cosas abominables." "En el alboroto hubo quien pidió su montura, otro sus armas y otros más jarras de vino." "La mayor parte se negó a seguir adelante, pero tres de ellos, los más valientes, o tavez, los más ebrios."
"Hasta ahora he limitado mis investigaciones a este mundo... enfrentar al mismo Padre del Mal me parece una tarea por demás ambiciosa."
"Los agentes del demonio suelen ser de carne y hueso."




Descargue su copia del "Sabueso de los Baskerville" aqui.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

mira ke mono es... si asta parece ke sonrie

Anónimo dijo...

mira que bonito es el perrito... si asta parece ke sonrie

Tony Chávez Uceda dijo...

Si pues, aunque en su momento el libro me puso los pelos de punta, el sabueso en ciernes nos deja ver unas fauces llenas de maldad, pero también de humor negro. Gran libro, espero que puedas leerlo.

Anónimo dijo...

yoo leeii ell liibroo y reallmente me dioo suustoo y tuube que bajar, al primer piso jejee mm perrom maaloo ¬¬ ejej muyy bnoo ell libroo esoo sii._!!

Tony Chávez Uceda dijo...

Mucho peor el dueño del can, quien lo dejaba de hambre, lo apaleaba, y luego lo untaba con fósforo para que brillase en la noche, al soltarlo. El perro de la leyenda es ciertamente terrorífico. Gracias por tu comentario.