martes, 19 de marzo de 2013

El sueño ha resucitado



La resurrección de Lázaro por Geertgen tot Sin Jans


Como había mencionado en un post anterior, lo único que resucita en esta vida son el amor y los sueños. Este 2012 que pasó estuvo lleno de sucesos que llevaron mi vida en diferentes rumbos, con nuevos horizontes y renaceres inesperados. En una serie de conflictos a nivel laboral, de repente sentí la misma sensación dantesca descender por los senderos de la decepción profesional. La crisis se agudizó a mediados de mayo y de repente me di cuenta que no podía dejar muerto y enterrado mi sueño del cine. Quien sabe esa irresistible tendencia de crear imágenes que vistan a una música no podía ser un simple onanismo mental inconsecuente ni una vanidad pasajera. Es entonces como me decidí volver por las sendas de Truffaut y Kurosawa. Eran días en los que me encontraba escuchando una y otra vez la tercera balada de Chopin, en realidad, como parte de un proyecto de crear cuatro cortometrajes mudos en las cuatro baladas del genio polonés. La tercera balada, sin embargo, contenía una enorme cantidad de mensajes llenos de pasión y romance. 

Tomé la decisión de viajar a concretar el sueño de estudiar cine, y al final, formar parte de una comunidad de cineastas. Al residir mi hermano en la calurosa y sureña ciudad de Houston, se me dio por surfear un rato para conocer si existía alguna escuela de cine en esa ciudad, es así como llegué a este sitio.

http://www.nextactor.com/ 

Así sucede como en otras veces, me vi en los trámites de visa, pasajes, itinerarios, coordinaciones. Me alegró mucho que se decidieran aceptarme, no había marcha atrás. Iba a filmar la historia que me inspiraba la tercera balada de Chopin, y lo iba a hacer en el país al que alguna vez consideré un enemigo de proporciones nucleares.

La vía más económica desde estos lares al país yanqui es muy larga y dilatada. 7 horas hasta Dubai, y luego 16 horas hasta Houston. El avión describe un enorme arco geodésico que cruza 9 husos horarios y virtualmente más de una tercera parte del mundo. Así llegue a integrarme a este muy genial grupo de amigos, y sin mayores preámbulos, he aquí el fruto de esa estancia tejana. La historia de un pianista que recuerda como conoció a su esposa mientras toca la tercera balada de Chopin. 






Debo acotar que Next Actor Studio me ha concedido el honor de incluir mi cortometraje en la sección de películas de estudiantes, les estoy muy agradecido por esa deferencia.

viernes, 4 de enero de 2013

Amalita regresa


Hospital Loayza, años 50.

Hace unos cuantos meses tuve la gran dicha de participar en un concurso literario con la gran oportunidad de conocer al grandioso don Mario Vargas Llosa. A pesar de no haber ganado, quiero compartir con ustedes, dignos lectores de estas líneas virtuales, el contenido de mi texto, 200 palabras que expresan lo que pasó con uno de los personajes de ese gran monumento de la literatura peruana...


“Está frente a mí, dice que es mi tío, mi tío Ludovico. Tal vez deba creerle porque lo ha traído mi tío Hilario Morales, aunque es posible que entre ellos no haya mucho parentesco o amor.  Mi mami Lupe parece haberse deshecho en lágrimas la noche anterior. Te vas a Lima, me dice, es importante, no me dice por qué. Y comienza un largo viaje, un viaje que jamás habría podido imaginar, con bochornos insoportables hasta Tingo María, con frío y soroche hasta Huánuco, de allí hasta Huancayo. Al llegar el tren a la estación de Desamparados me da la impresión de haber hecho este viaje hace mucho tiempo, casi como en otra vida, en dirección opuesta. Lima, con sus edificios que se agazapan vertiginosamente sobre mi cabeza. Los micros pasan repletos por Alfonso Ugarte. Con el tío Ludovico bajamos frente a un hospital lóbrego y gris. Una monjita de dulce aspecto nos conduce a un pabellón, y allí está, finalmente, demacrado, tan emaciado, tan dolido y sufriente, sus negros ojos son un espejo de mis ojos, su negra piel parece pegada a los huesos…”

-  -         Amalita, Amalita Hortensia –dice a duras penas Ambrosio, por unos momentos ya no se siente tan jodido.


martes, 1 de enero de 2013

Musica por fin de año.


Estimados amigos y lectores de este rincón digital. Finiquitando este año de 2012, les dejo esta selección de obras para que reciban el 2013 con el ágape en el zénit, o al menos cercano al Olimpo.


WAGNER: OBERTURA DE EL ORO DEL RIN.
El grandioso maestro germano nos va envolviendo en camadas de música, discretas en un inicio, pero que luego se van volviendo un torbellino de armonías irresistibles




MOZART: SINFONIA 41, CUARTO MOVIMIENTO:
Grandioso final de esta bella sinfonía que evoca al dios de los dioses griegos, con todo el vigor que a una orquesta del clasisismo le podía sacar el gran Wolfgang.




BEETHOVEN: SINFONIA 7 CUARTO MOVIMIENTO.
Un festivo final de esta sinfonía magistral, con todo el ágape, alegría y entusiasmo posible. Imprescindible para iniciar el nuevo año con una gran nota de buen ánimo. Los cornos simplemente dan los toques ineludibles de la mas desbocada alegria.




BACH: CONCIERTO DE BRANDEMBURGO N 3
La perfecta coordinación de la voces y la manera en como se entregan la posta melódica, hace de este concierto un verdadero himno a la bondad y felicidad.





OFFENBACH: OBERTURA DE LA VIDA PARISINA.
Esta accidentada opereta con su muy improbable inclusión de un personaje brasileño, tiene uno de los finales con los que Offenbach suele reducir a la tristeza a algo menos que cenizas.




JOHANN STRAUSS HIJO: OBERTURA DE "EL MURCIELAGO".
Los primeros compases de esta opereta por el gran compositor del "Danubio azul" y el "Vals del emperador" nos transportan a un universo donde hasta las penas provocadas por el adulterio, la cárcel y los desengaños, son dejadas de lado por un poco de champaña, salud.



VIVALDI: CONCIERTO PARA LAUD EN RE MAYOR.
Una obra llena de ese vigor y unidireccionalidad típicas del barroco, tan ceñido a reglas, tan lógico, tan consecuente, tan esplendoroso.



CHOPIN: ANDANTE SPIANATTO Y GRAN POLONESA BRILLANTE
La única obra para piano solo en esta selección, que el brillante genio polonés logra transformar en una orquesta virtual.


SHOSTAKOVICH: SINFONIA 10 TERCER MOVIMIENTO
El testimonio de amor más perfecto plasmado en una sinfonía. El gran Dima escribe su nombre e notas, y también escribe el nombre de su amada en notas (que solos de corno tan espectaculares) y deja este monumental movimiento, verdadero triunfo del amor platónico.


PROKOVIEV: DANZA DE LOS CABALLEROS
Finalmente, esta obra que es capaz de mover montañas, el himno perfecto antes de emprender cualquier gran empresa. Y que el 2013 sea el año de las grandes y exitosas empresas para cada uno de nosotros.

Feliz año nuevo mis queridos amigos....