viernes, 17 de septiembre de 2010

Leningrado.



La bella, la revolucionaria, la ciudad que fue creada desde cero por la visión de un titán, aquella que transformó a Rusia de tantas maneras. Nacida por el esfuerzo y pujanza del monarca Pedro I, el Zar de Zares, el que sacó a la Madre Rusia del pseudo barbarismo. Quiso incluso llegar a formar parte del selecto club de naciones colonialistas, y no dudó en escatimar medios y vidas humanas para lograrlo. Leningrado está construida sobre los huesos de sus constructores.

Pero este esfuerzo al final resultó en la creación de una maravilla de ciudad, con lugares memorables, imperecederos, llenos de un refinamiento y belleza inigualables. Dar un paseo por los Jardines de Verano, con sus estátuas de mármol o por el malecón del Palacio, para ver la extraordinaria silueta de la fortaleza Pedro y Pablo, con el fondo de una noche blanca. Perderse en la interminable colección de arte en el Museo del Ermitage, el único que puede ganarle al Louvre de París. Ver en un mismo dia arte griego genuino, La Madonna Litta de da Vinci, La Dánae (con Zeus en forma infame de lluvia áurea) de Tiziano, el opulento Mercado de Pescado de Frans Snyders, para luego rematar la jornada con algo de arte moderno, la Casa Blanca de Noche de van Gogh, Ajenjo de Picasso, El Cuarto Rojo de Matisse, o Taperaa Mahana de mi admiradísimo Paul Gaugin. Al pasar por el famoso arco donde las tropas bolcheviques tomaron el poder en 1917 hay dos opciones, seguir por Nevskii Prospekt y ver las impresionantes Catedral de San Isaac, Catedral de Kazan y el Gostíni Dvor, o ir a la derecha para disfrutar de la fachada del Almirantazgo y unas cuadras más allá del mundialmente famoso teatro Kírov (Mariinsky).

Si los paseos son su distraccción favorita, no está demás una vuelta por el Jardín de Verano (Ле́тний сад), precioso lugar que tiene un aire y un ambiente tan íntimo y tan romántico, resaltado por sus magníficos conjuntos esculturales, que muchos corazones se han estremecido o jurando amor eterno bajo sus sauces y robles. Algo que distingue al Jardín de Verano es su peculiar enrejado, con detalles en bronce. También está el palacio de la Tauride, famoso por sus lujos y excesos, que mandó la misma Catalina la Grande.

O talvez prefiera dar un paseo por los alrededores, ver el impresionante Palacio de Pedro (Petrodvorets, Peterhoff) con su conjunto de fuentes en donde destacan: la Fuente del Ajedrez, la Fuente del Sol, las Fuentes de Adán y Eva, La Fuente de Neptuno. Aunque la Cascada Principal y la Fuente de Sansón Luchando con el León son monumentos que convierten a este lugar en una espectáculo sin par.

Los recuerdos de Leningrado siempre ocasionan torbellinos jupiterianos en el hipocampo, por su calidad y vívida emoción, bella ciudad, incontrastable, en tí solo ha nacido cosas bellas, no te rendiste ante las hordas de Hitler, tampoco ante tantas crisis, tampoco ante tantos vaivenes de la historia. En tí compuso versos Pushkin, novelas Dostoyevski, sinfonías Shostakovich. Así como en tí nació la nueva Rusia del siglo XVIII, en tí se gestó el esbozo del futuro del ser humano, como lo describe el gran Dima en su 12 sinfonía, el despertar de la humanidad.

San Petersburgo es tu nombre ahora, en mi corazón también te seguiré llamando mi querido Leningrado.

4 comentarios:

Liliam Chavez dijo...

Mi visión personal, es que has tenido una gran sensibilidad para relatar los destellos de esta ciudad hermosa, ciudad que resistió, gracias al heroísmo de sus habitantes.

Muy bonito sobrino, te !!felicito!!, me has hecho recordar momentos inolvidables vividos, de la Capital mas hermosa de Europa. Y las fotos que presentas, son también muy bellas.
Tu tía Liliam

Lola dijo...

A mi me ha encantado conocer y recorrer esta ciudad, maravillosa, de tu mano, Tony. Desde luego es una preciosidad; muchas gracias, cicerone.

Tony Chávez Uceda dijo...

Querida tía: cómo no sentir tanta felicidad de recordar ese mítico lugar. También recuerdo la hospitalidad y cariño que me brindaste cuando me tocó visitarla. Un abrazo grande grande, y bienvenida a mi blog.

Tony Chávez Uceda dijo...

Gracias Lola, espero que algún día puedas ir allá en persona, es una experiencia inolvidable, muchos saludos.