Asalto al palacio de invierno, San Petersburgo
Hoy es un día de fiesta para mí, por más sorna que intenten demostrarme algunos, y quiero expresar tantas cosas. Pero hoy también tengo muchas cosas que preparar, así que solo citaré de qué manera me he beneficiado yo de esa magna fecha. Puede ser que algunos digan que mi existencia y lo que me ha pasado no significa nada, es cierto, la de ustedes no significa nada tampoco en un contexto global. Pero yo debo agradecer a la gente que logró la victoria de hoy porque...
... existo, simplemente existo, mis padres se conocieron en el Centro Cultural Peruano Soviético, ubicado en la Avenida El Ejército, Trujillo, Perú. Se casaron en la Unión Soviética, y yo llegué al mundo en Moscú, sin que mi madre pagara un centavo por la atención, en medio de las obreras y campesinas que acudían a ese nosocomio a traer al mundo a mis paisanos.
... logré el saber, tantas cosas, al regresar a la patria, logré aprender tanto sobre ciencia y filosofía, y una vez más, los soviéticos no me cobraron un centavo, así como no les cobraron un centavo a mis padres por sus bachilleratos ni sus maestrías. Mi adorada escuela 113 fue un templo del saber, y todas las bases de mis conocimientos las fundé allí.
... logré estudiar, en otra patria socialista, Angola, a quien la Unión Soviética apoyó de mil maneras, para que pudiera salir de la barbarie de su guerra fraticida e independencia. Así como muchas naciones Africanas pueden tener alguna base académica que la patria socialista les donó. Ya llegará el momento de rendir homenaje a mi escuela, la Frederich Engels, donde se consolidaron aun más mis conocimientos (verdad, ya les mencioné que allí tampoco pagué un solo centavo)
... logré ser honesto, porque el ideal socialista es que la riqueza proviene única y exclusivamente del trabajo, y no de la especulación, usura, plusvalía, en otras palabras, del libre mercado.
Es decir, hace 93 años la humanidad despertó, y si bien las políticas fracasaron, el mundo aceleró su ritmo, logró darle chance a los países pobres, logró avanzar la ciencia hasta niveles insospechados, por la gran victoria bolchevique. Lo triste del socialismo es que exige mucho del ser humano, y en esta época donde ser ignorante, grosero, agresivo, es sinónimo de fortaleza, valentía y determinación, podemos esperar poco del ser humano.
Y para terminar, aquí esta la grandiosa sinfonía 12 de Dimitri Shostakovich, dedicada a esta magna fecha, en su último movimiento, "El Amanecer de la Humanidad".
4 comentarios:
Gostei.
Muito obrigado pelo aprecio, volte sempre.
Choche, mi viejo siempre ha sido recontra aprista y siempre habló pestes de los comunistas, por lo que siempre tuve prejuicios, pero al conocerte pude realmente saber de todo lo bueno que Rusia le ha dado al mundo. Yo también me sumo a tu celebración en este día amigo, saludos desde el rico Trux.
Claro Alfredo, el pleito entre el Apra y la izquierda siempre ha sido gratuito e incosecuente. No se puede dejar de admirar la vitalidad de tu partido ni su siempre importante presencia en la democracia de nuestro pais, controversias a parte.
Sigamos adelante, companeros y camaradas!!!!!!
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